lunes, 14 de septiembre de 2020

Capítulo 18









Franco y Max están frente a frente. Franco quiere saber porque su hermano tiene entre sus cosas películas de porno gay. Hay mucha tensión entre esos dos hermanos que siempre fueron cómplices.
--¿desde cuando me registras mis cosas? --Max.
--nunca me has impedido que lo haga y eso no es el punto¿no es que habia confianza?
Se miran esperando a ver quien de los dos dice algo más. Max no sabe qué decir.
--¿que significa esto?
Max se arma de valor.  Es su momento más temido.
--creo que es evidente...soy gay.
Franco no es que lo quiera juzgar por ser gay. Le sorprende que se haya casado, que no se lo haya dicho.
--por eso no quieres que esté con una mujer ¿es que quieres que sea gay como tu?
En esos momentos a Franco lo que más le duele es que su hermano no haya sido sincero y que por el hecho que a él no le gusten las mujeres no quiere que él esté con una.
--No... no es por eso. Espera, en un rato es el almuerzo... quedate aqui... podremos hablar sin que nos molesten.
Franco camina arriba a bajo de ese pequeño cuarto. Max nervioso. Ha llegado el momento que más ha deseado y temido.


Por su lado, David está en la facultad. Oye que unos chicos silvan.
--¡¡que bombon... ven con papi, mamita...¡ --van gritando.
Se da cuenta que la chica que está provocando esas cosas es nada más y nada menos que Luzia. Le da mucha rabia que la chica se muestre coqueta con todos. Se acerca a ella. La agarra del brazo.
--¿¿qué haces aquí? ¡¡estás loca...¡
Los chicos lo miran con envidia.
--¿es tu novia?
Luzia es la que dice:
--No... No... yo lo estrené pero fue por dinero...
David la mira con los ojos como platos. Los chicos empiezan a sacar dinero.
--¡¡cuanto...¡¿¿cuanto?
David la saca de allí. Está furioso. Muerto de los celos. Discuten en el patio.
--¿¿¡qué te pasa?¿¿¡estás loca?¡ ¿¡a qué juegas?¡ ¿¿eso es lo que quieres que sepa mi padre??
Luzia se lo toma todo a risa:
--es solo una broma...
David echa fuega por la boca.
--¡¡eres una perra y haré lo imposible para sacarte de mi casa...¡
Luzia se muestra muy sensual. Muy provocativa:
--lo que pasa es que te da rabia que nunca ese cuerpito será para ti...
David está desesperado. La mira con cara de depravado:
--¡¡cuanto cuestas...??¡ --dice sacándose la billetera.
Ella le frena la mano y con descaro le dice:
--para ti nada, no puedes pagarlo¡¡
--¿¿¡quieres decir que los demás si te pueden pagar? ¡¡cuanto te paga mi padre...?¡ --dice él enloquecido por los celos.
--¿¡que te importa?¡ --ella con ironía.
--puta¡¡ --él muy dolido.
--maricón... --ella riendo.
Él la besa a la fuerza y ella le muerde el labio.
--¡¡no eres hombre para mi...¡
Se va riendo y David se queda como loco.
--¡¡me las vas a pagar...¡
Más que nunca quiere acostarse con ella. Por el polvo y la venganza.
--¡¡será mía... la voy a destruir...¡¡


Max regresa al cuarto de atrás. Cierra con el cerrojo para que nadie les moleste. Hablan sentados sobre unos sacos.
--ahora quiero saberlo todo.
Max lo mira con cariño.
--¿¿qué quieres saber?
--No sé... ¿eres gay gay?¿desde cuando?
--desde siempre --le sonríe con timidez.
--¿y por eso papá te odia?
--No... él no lo sabe.
--¿y quien lo sabe? Javier? ¿por eso te odia?
--Y Camila. Nuestro matrimonio nunca fue tal.
--¿porque nunca me lo dijistes?
Max mira a su hermano con mucho cariño. Le acaricia la mejilla:
--Javier me odia por ser gay, tenia miedo que a ti te pasara lo mismo
--¡¡no... como te iba a odiar¡ ¡¡yo te quiero¡
Franco lo abraza. Max tiembla en sus brazos.
--entonces ¿no me odias?
--No... yo jamás me metería en tu vida sexual... pero ¿porqué tú te has metido en la mía?
Eso sí suena a reprocha y Max no sabe cómo justificarse sin decirle verdad. Ha estado tanto tiempo frustrándose, ahora lo tiene tan cerca. Sus labios buscan los de un aturdido Franco y los roza:
--porque te amo... porque estoy enamorado de ti.
Franco responde con sorpresa pero no sólo no rechaza el beso de su hermano sino que le responde. Aunque le parece horrible lo que está pasando a Franco le gustan los besos. Las caricias de su hermano.
--¿quieres que pare?
--no --jadea Franco timido.
Max sonríe con emoción. Lo siente temblar. Gozar. Le gusta. Los dos disfrutan la compañía del otro. Franco mira a Max con confusión, con cariño. Max ya no puede frenar. Acaricia por todo el cuerpo a Franco lo tumba junto a él. Max siente el deseo de él y eso lo anima. Lo va acariciando y cada vez va bajando más y va notando más excitado a su hermano:
--tú un dia me dijiste que yo soy la persona con quien tienes más confianza... Yo te dije que esa era la persona con quien deberías vivir tu primera vez, que sería hermoso.
Franco está confundido. Nunca tuvo fantasias con un hombre y menos con su hermano pero le está gustando que su hermano lo toque, lo bese.  Eso lo confunde.
--si pero ...--balbucea.
Max lo extrecha entre sus brazos.
--y no creo que nadie más que yo merece ser el primero... enseñarte del amor y del sexo.
Para Max es como un sueño, siempre quiso decir eso, estar así con su hermano.
A Franco también le gusta y ahora está sintiendo el menos tormento de confusión que por tanto tiempo ha arrastrado su hermano:
--eres mi hermano ...
--¿y quien ha dicho que nos podemos amar?--jadea Max.
--el sexo no es para con los hermanos.
--¿y donde pone eso?
Lo besa, lo va desnudando... Franco está inseguro pero se deja hacer.
--esto está mal.--dice con timidez Franco.
--pero te va a gustar0--le dice Max con deseo mientras se va fundiendo en el cuerpo de su hermano.

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